Entre los melómanos hay diferencias, algunos son seguidores de artistas que perduran a fuerza de repetición, otros que son sumamente complacientes y los pocos son los que están dispuestos a experimentar y vivir la aventura de la improvisación. Para esos últimos melómanos existe uno de los festivales que ha tomado relevancia en el Distrito Federal, estamos hablando de “ARS FUTURA” Festival de música sin fronteras que por 5to año consecutivo se llevó acabo, ahora en las instalaciones de Teatro al aire libre Ángela Peralta.
Bajo un cielo gris que amenazaba con ponerse triste y empaparnos de lluvia, al final desistió y se unió a los cientos de fanáticos congregados ahí que esperaban ver las propuestas de esa tarde-noche programados el festival.
Con el típico conteo de “última llamada” que caracteriza a los teatros, arribo al escenario el primero de los artistas invitados, en una dinámica de 3 bloques que dividieron a los 5 artistas de talla internacional.
Con un chelo bajo el brazo llego Jeffrey Zeigler (ex chelista de Kronos Quartet) e hizo gala de su ejecución durante una hora, adentrándonos en una especie de experiencia melancólica y delirante y más cuando salto al escenario el compositor Felipe Pérez Santiago para acompañarlo con su guitarra eléctrica en dos composiciones creadas por ese último y juntos hacer crecer la experiencia sonora que se estaba empezando a generar en el recinto.
Pasada una hora y a la expectativa de los melómanos con las miradas dirigidas al cielo muy al pendiente del momento en que la lluvia haría acto de presencia (cosa que afortunadamente nunca sucedió) salto al escenario los artistas que conformaron el segundo bloque, ellos fueron John Medeski (Medeski Martin Wood) y Todd Clouser (A Love Electric) en un acto especial que se caracterizó por su libertad e improvisación, llegando a su clímax cuando de la nada surgieron entre el público tres artistas más, una cantante con una estupenda voz, un saxofonista y trombonista. Todos daban la sensación de estar en un campo abierto donde se podían encontrar cosas inesperadas y como los propios músicos definieron como una especie de arte efímero que no se volverá a tocar.
Y así paso otra hora más de Ars Festival donde la gente iba y venía, esperando lo que vendría hacer el plato fuerte de aquella tarde-noche con la actuación del aclamado saxofonista Erik Truffaz y el Dj y productor oriundo de Tijuana, Fernando Corona conocido mundialmente desde hace años en la industria como Murcof.
Poco más de una hora, nos llevaron con su propuesta de jazz minimalista en colaboración con un baterista y un guitarrista a una especie de historia truculenta de asesinos en serie y seres llenos de locura y esquizofrenia, todo ello reforzado con imágenes de comic en pantallas gigantes que amalgamaban a la perfección el momento de la actuación.
Con ellos se dio por concluida una emisión más del Festival de Música sin Fronteras “Ars Festival” un evento breve, comodo, mas dirigido al melómano exquisito y arriesgado, dispuesto entregar su
alma y dirigir sus oídos a otras músicas innovadoras, fiesta de música que se aleja de los festivales mainstream al que nos tienen acostumbrados.
Cabe mencionar que Ars Festival tiene varias ediciones previas, pues inicio en 2010 como Festival Sin Etiquetas, en 2011-2012 se llamó ArsFutura, en 2013 quedo pendiente y en 2014 se realizó como ArsFutura.
Es sin duda alguna un evento importante que quizá no atraiga los miles de seguidores como el Vive Latino o el Corona Capital, pero es precisamente ahí donde radica su encanto, su magia, lo vuelve no un evento excluyente, sino un festival para melómanos arriesgados.
Estaremos al pendiente delo que traerán para 2016