FOTOS CORTESIA CESAR VICUÑA
Por @DaNiBiKoLoR
Si hay algo que desde siempre le he admirado a Caifanes, además de su música, es la magia que crea en cada una de sus presentaciones, aquellas en donde distintas generaciones nos hacemos uno a la voz de Saúl Hernández; al sonar de la bataca de Alfonso André; las notas del saxofón de Diego Herrera, o el retumbe del bajo de Sabo Romo, que en conjunto convierten cualquier escenario en un mundo lleno de sentimientos, emociones y nostalgia.
Así fue como se vivió la noche de ayer en el Palacio de los Deportes, un recinto que muchas veces ha sido casa de esta emblemática banda para reunir a más de 15,000 fans entre niños, jóvenes y adultos; generaciones que han vivido, disfrutado de éxitos que hoy en día son toda una leyenda musical.
“Debajo de tu piel”, “Para que no digas que no pienso en ti”, “Miedo”, “Te estoy mirando” y “Cuéntame tu vida” fueron las canciones que se encargaron de poner el ambiente entre el público que desde las 21:00 hrs. ansiaba vivir la década de los 80’s de la mano de Saúl y compañía. A este set list se le sumaron temas como “Viento”, “Detrás de ti” “Mátenme porque me muero” y “Metamorfeame”, todos ellos coreados y aplaudidos por la ‘raza’ ahí presente.
El tiempo siguió su curso, y parte de los momentos más grandes de la noche fueron cuando los acordes de “La célula que explota” aparecieron; cuando Saúl nos invitó a reflexionar a cuidar de los niños asegurando que son la esperanza de nuestro país, o cuando todos aseguramos que “Antes de que nos olviden, haremos historia”.
Lágrimas, euforia, gritos y hasta baile es algo de lo mucho que provoca escuchar a Caifanes en vivo, no importa si es tu primera o sexta vez, esa nostalgia que despiertan en su gente, en su ‘raza’ es lo que los sigue haciendo únicos además de sus canciones.
El set list continuó con “Los dioses ocultos”, “Hasta que dejes de respirar”, “Aviéntame”, “De noche todos los gatos son pardos”, “Amanece”, “Nubes” hasta “Nos vamos juntos”, tema que sirvió para el primer encore que comenzó con la aparición de Diego Herrera y su saxofón marcando la pauta para tocar “Quisiera ser alcohol”, “Mariquita” y “Amárrate a una escoba y vuela lejos”.
El final de la velada se anunciaba y para cerrar literalmente con broche de oro, llegaron temas como “Afuera”, “No dejes que” y “La negra Tomasa” para ponerle ritmo, fuerza y más emoción a este concierto que reafirmó la grandeza de esta banda, de este cuarteto que sigue y seguirá vivo en cada uno de los amantes del rock nacional.