Del 2004 a la fecha Arcade Fire se ha convertido en una de las bandas más importantes y destacadas del Indie. Desde su primer trabajo dieron vistos de genialidad con composiciones brillantes y de un sonido muy maduro con el disco “Funeral“, siendo éste su primer material y el que inmediatamente apuntara los reflectores hacia ellos. Versos ocasionales en francés en la voz de Régine Chassagne, y quien representa la parte tierna de la banda en contraste con la imponente personalidad de su esposo Win Butler. Cada uno de sus álbumes tiene un sentido conceptual, pues las letras y la tónica de las canciones tienen relación con el título del álbum en cuestión. Con 4 álbumes de estudio y un quinto en camino, nos dimos a la tarea de estudiar minuciosamente cada una de las producciones de la nombrada una de las bandas favoritas de David Bowie.
10. “Empty Room” – The Suburbs
El álbum “The Suburbs” es de un sonido muy orgánico, tiene poca mano de parte de la producción. Es un disco muy amigable musicalmente para introducirse en la banda por la sinceridad de su sonido. “Empty Room” es una canción infravalorada por los seguidores y por la misma banda, pues pocas veces ha sido tocada en vivo. Desde el comienzo entra un violín con arpegio y de súbito entra la banda completa resaltando el sonido de la guitarra eléctrica con un “e-bow”. Dulces coros finales en el usual francés de Régine mientras el sonido se disipa y concluye.
9. “Black Wave // Bad Vibrations” – Neon Bible
Aquí tenemos un contraste marcado por las cabezas de la banda: Win y Régine. Dos canciones en una que parecen contrapuestas entre sí. Gran parte del éxito del segundo álbum “Neon Bible” se debe a la forma en que fue grabado. Para ello compraron el inmueble de una iglesia y la convirtieron en su estudio de grabación. Es por ello que la reverberación natural en ese tipo de recintos debido a la estructura influyó significativamente en el sonido, dándole más cuerpo con ese eco natural. La primera parte está compuesta por el mecer de la voz femenina junto con un inocente violín, mientras eventuales trompetas tiñen el sonido y junto con una guitarra con excesivo “Fuzz”. La segunda parte deviene en algo más agresivo. Tal pareciera que en esta canción están plasmadas las personalidades del matrimonio Butler-Chassagne.
8. “Supersymmetry” – Reflektor
Qué gran orgullo y privilegio fue para Arcade Fire que David Bowie, además de declararlos sus favoritos, colaborara en la producción del cuarto disco “Reflektor”. El cambio aquí es muy notorio, y tal parece que se metieron totalmente a la experimentación, pues hay canciones que no suenan mucho a lo que conocimos de los canadienses en un principio. No dudamos que el Sr. Bowie les haya pastoreado por tal camino, y ahora con la venida de su quinto disco continúan sobre ese camino. Las voces de Win y Régine cantan al unísono enmarcados por lo que parece un sampleo que domina durante toda la canción. En este disco vemos que hay canciones que jalan hacia varios lados, no todas siguen una misma línea, pero esta experimentación embelese a quien la escuche y se deje llevar por las capas que se van superponiendo.
7. “Sprawl II” – The Suburbs
Esta es una de sus canciones más conocidas y representativas de la banda. Podría sonar algo plana en un principio, pero a lo largo de sus poco más de 5 minutos está llena de matices de distintos instrumentos y secuencias. El bajo tiene, entre otros efectos, un octavador, que lo hace sonar más grave, lo cual es un gran contraste contra la voz de Régine, suave, matizada, dulce, pero que no empalaga. Uno escucha esta canción y su mente viaja a la década de los ochenta, con mucha riqueza musical y efectos presentes, como el “shifter” al cambiar de estrofa, golpes de guitarra al iniciar cada compás, un piano y armonías que se mezclan sigilosamente.
6. “Wake Up” – Funeral
Esta canción tiene un gran significado para la banda. Desde el comienzo hay un coro atronador. La letra es un bello poema a no vivir más en tu error, a despertar y continuar, antes de que se convierta en polvo. La forma en que se ha presentado en vivo ha sido bastante emotiva, sobre todo cuando David Bowie se subió con ellos al escenario en el 2005 a cantarla, con Win tocando un curioso modelo ES-335 de 12 cuerdas, lo cual le da más cuerpo al sonido de su guitarra.
5. “In The Backseat” – Funeral
El tenor de la canción va de acuerdo a la letra, reflejando la contemplación y la tragedia en la misma canción. Comienza con un muy sutil arreglo de cuerdas y una guitarra, mientras las primeras líneas narran el nulo rol de los pasajeros en la parte de atrás de un auto durante el viaje, limitándose normalmente a observar el paisaje. La agresiva guitarra entra y con ello la tragedia en la letra, “Alice died // In the night // I’ve been learning to drive // My whole life // I’ve been learning”, que arrecia el sentimiento con un canto más dramático de parte de Régine, que finaliza el disco en un lamento entre violines.
4. “No Cars Go” – Neon Bible
El segundo disco está repleto de temas tan buenos como éste. En varias veces hemos visto a Win coger el bajo, así como la guitarra y el piano también. “No Cars Go” es una de las canciones con los finales más impresionantes y perfectamente bien estructurados que ascienden de una forma muy extasiante, y que de pronto todo eso que se acumuló se disipa de una forma tan simple, con lo cual tras escucharla lo único que se puede hacer es expresar admiración y volver a ponerla. Régine saca aquí su acordeón de teclas y le da un toque muy agradable al sonido. La presencia de latones durante toda la canción es muy notoria y enriquecedora, y muy importante para la culminación final. Tras el puente, la batería comienza marcar el ritmo con pura tarola y tom de piso, mientras se gritan “Let’s Go” y todo Arcade Fire se une en un coro que va in-crescendo para finiquitar en un sorprendente final.
3. “It’s Never Over (Oh Orpheus)” – Reflektor
Las atmósferas características del cuarto disco son más notorias en la segunda parte, ya que viene presentado en 2 discos. Es casi obligatorio escuchar esta canción después de “Awful Sound (Oh Eurydice)”, tal como el relato de la mitología griega. Esta canción es tan sutil y suave que del mismo modo que ablandó a Hadés y Perséfone, lo mismo hará enamorándonos como a Euridice. La letra refiere a la condición de Hades para que Euridice regresara del inframundo tras haber muerto, así que ella caminaría detrás de Orfeo, pero él no debía voltear, y ante su desesperación por saber si ella viene detrás de él, finalmente es arrebatada para siempre. Por esto mismo la letra tiene un tinte muy melancólico, con sonidos sintéticos.
2. “Awful Sound (Oh Eurydice)” – Reflektor
Normalmente uno no escucha este tipo de percusiones en una canción triste como esta. De nuevo volvemos al relato griego de Orfeo y Euridice. Las atmósferas que hay en esta canción son una clara muestra de lo fino que se volvió su trabajo. Entra un rasgueo con vibrato que se va disipando mientras un órgano muy agudo hace segunda voz. “I’m never coming back again” exclamado por Régine hace alusión de cuando Euridice es arrebatada para siempre de Orfeo. Tal vez el título se refiera a cuando Euridice murió y cayó en el inframundo, mientras Orfeo descendía a rescatarla. El final y la forma en cómo se va perdiendo la canción es de lo más desgarrador y triste de su carrera “Oh no, now you’re gone”.
1. “Neighborhood 1 (Tunnels)” – Funeral
Es innegable que esta es la mejor canción que han hecho hasta la fecha. Hay canciones demasiado buenas, que le pueden competir al primer tema de su primer disco, pero muy difícilmente podrán superarlo. La adecuación de cuerdas siempre le dará un sentido diferente a las canciones. Tal pareciera que hay un cierto tipo de reclamo de parte de Win como trasfondo en la letra de la canción, tanto por los versos como por la forma tan energética de cantarla. Sin duda el disco “Funeral” fue una excelente carta de presentación, con arreglos impecables como en este tema, la batería contrapunteando, la progresión de los violines. Veamos de qué modo han evolucionado para su quinta producción.