Fotos de: José Carreon
Ni la noche de lluvia fue capaz de parar a la gente que poco a poco iba llegando al Auditorio Nacional para ver a Babasónicos, el grupo de rock argentino que visita nuevamente México presentando su último disco Discutible (2018).
El encargado de abrir la noche fue Salvador y El Unicornio, quien junto a sus músicos le puso ritmo y buena vibra a la espera.
Para las 9 pm y con un Auditorio casi lleno en su totalidad, se apagaban las luces para recibir a Babasónicos en medio de una ola de aplausos y gritos.
El show comenzó con Ingrediente, en medio de una puesta muy sobria. Proyecciones en la pantalla central y destacando en medio la figura de Adrián Dárgelos, frontman de la banda, quien se encargó de lucir su capa negra que ya es sello distintivo de su atuendo en esta gira, rodeado de Diego Rodriguez (guitarras, coros y percusión), Diego Tuñón (teclados), Diego Castellanos (batería), Mariano Dominguez (guitarra), Carca (guitarras, percusión y coros) y Gustavo Torres (bajo).
El setlist continuó con En Privado, Bestia Pequeña y Vampi. “Buenas noches, gracias!” fue el breve pero eficaz primer contacto de Adrián con el público. Siguieron El Loco, muy celebrada por la gente, y Pijamas, en medio de una explosión de colores en pantallas y luces. Dárgelos bailó incansable en Sin Mi Diablo y Tormento. Diego Rodriguez casi podría decirse que se convierte en un segundo frontman, luciéndose todo el tiempo con sus bailes mientras toca o acompaña en voces. “Gracias por acompañarnos todos estos años” fueron las palabras de Adrián, quien no dejó de agradecer a su público a lo largo de todo el concierto. El primer set llegaba a su fin con El Colmo y La Lanza.
Pasadas las 9:30 pm terminaba el primer interludio, y Babasónicos volvía a la carga con Adiós en Pompeya, canción en la que destaca un solo de theremin en manos de Carca, en medio de un escenario completamente rojo. Para continuar sonaron Irresponsables y Trans-Algo. Hubo un momento especial para los nostálgicos con Sobre la Hierba, rola del año 1992.
Las cosas se pusieron movidas nuevamente a puro flash de luces y baile descontrolado en el escenario con Desfachatados y Pendejo. Para bajar un poco las revoluciones eligieron Un Pálpito y Cómo eran las cosas. “Acá con ustedes esta noche!” fue la respuesta de Adrián a la frase “nos teletransportamos a donde desearíamos estar” de esta última canción, y al finalizar se tomó un momento en silencio, con los brazos extendidos y el público rompió en aplausos. El segundo set concluyó con Cretino y Orfeo.
Cerca de las 10:20 pm dió comienzo el tercer set bien arriba sonando Teóricos, La Pregunta, ¿Y Qué?. Ya a esa altura del show, el público había dejado la comodidad de sus asientos para bailar bien prendidos disfrutando de todas las rolas. Si a donde miraras veías gente bailando y moviendo el cuerpo. En el setlist siguió Partícula; Putita, uno de los más celebrados por la gente y que se ganó una ovación, y Los Burócratas del Amor. Adrián se puso fogoso en Risa y hasta bailó medio desprendiendo su camisa, lo que se desató un mar de gritos y aplausos. El show iba llegando a su fin y sonaron Fan de Scorpions, Carismático y Yegua, todas súper celebradas. Adrián empezaba a despedirse de su público con puros agradecimientos. “Dénmelo todo ahora, quiero más” en medio de una ovación que llegaba de cada rincón del Auditorio, mientras los músicos dejaban el escenario.
Llegaron los bises, y un momento muy especial. “Sabemos que hace 34 años y hace 2 años sucedió el terremoto en esta misma fecha en que estamos tocando, así que queremos dedicarles el show a las víctimas y familiares de las víctimas”, fueron las palabras de Dárgelos para recordar lo ocurrido y brindar su homenaje. Luego de dos horas de show así concluía la noche, para cerrar con Cuello Rojo y El Maestro.
Por mas que pasen los años, Babasónicos nunca pierde su esencia desfachatada e irreverente que siempre los caracterizó, y su explosión en vivo es algo que siempre vale la pena poder experimentar.
Juan Constanza